sábado, 10 de diciembre de 2011
jueves, 22 de septiembre de 2011
viernes, 3 de junio de 2011
Melomanía
martes, 24 de mayo de 2011
"Introducción al Jazz"
viernes, 29 de abril de 2011
"me vale madres México"
martes, 19 de abril de 2011
Castles made of sand
viernes, 8 de abril de 2011
Marillion
miércoles, 30 de marzo de 2011
Motivos para darte una bofetada
- No tengo "plan" para hoy y es sábado.
- Ya son las 2 am y no hay donde comprar alcohol.
- Necesito ropa nueva.
- Necesito una guitarra nueva.
- No he visto a mi novia en 2 dias.
- Todos quieren conmigo pero soy lesbiana.
- Ya tengo 2 años con el mismo auto, necesito uno nuevo.
- No quiero un tsuru porque está "feo".
- Necesito un lente nuevo para mi nikon D3000
- Este vestido ya me lo puse 2 veces, ya no sirve.
- Necesito otro celular (aquí si, patada en los _____)
- ¿Qué habrá pasado en el capítulo de ayer de mi novela?
- Necesito una tornamesa.
- Siento que sólo me está dando alas (snif snif).
- Perdió el realmadrid (o las chivas, américa, barcelona, manchester, etc.).
- Me siento solo(a).
- Me siento vacío(a).
- Me peleé con mi novio(a).
- Es martes y ya quiero pistear. (o cómo dicen en Colima "echar").
- No puedo ir, porque no tengo quien cuide a firulais.
miércoles, 9 de marzo de 2011
casi solo
viernes, 25 de febrero de 2011
The Fútbol
Lo primero que tengo que decir es que en las próximas líneas leerán al intolerante que llevo dentro (…y fuera), y como todo en este espacio, es una llana opinión personal. Espero que no haya malentendidos, sentimentalismos o criterios ofendidos.
Muchos me odiarán, al punto de abandonar este blog, y de antemano le pido una disculpa a sus fundadores. Existen 2 versiones de este post, una que dejo aquí, y otra que dejo acá, en mi blog personal, ustedes juzguen las diferencias (si es que se dan el tiempo de leer ambos posts).
Odio el fútbol y me resulta desagradable que amigos y familiares hablen de fútbol. Es una forma de apendejamiento social mundial, y de la sociedad latinoamericana y mexicana mejor ni hablar. Es ridículo el dinero que se mueve, muchos de los “jugadores” son literalmente intocables por los mortales. Y nosotros seguimos comprando la playera del Madrid, la bufanda del Barcelona, y pagando “sky con el paquete championslig” para poder ver un partido en T.V.
Sin embargo amo, el fútbol fue un parte-aguas en mi vida.
Muchos años tuve la ilusión de dedicarme a este bonito deporte toda mi vida, jugar un mundial ante miles de espectadores, firmar autógrafos y todas esas cosas. Mi mamá siempre me decía “a ti ni te gusta el fútbol, ¿porque te apasionas tanto? Si te gustara de verdad, te la pasarías viendo partidos en la tele”. No me apasionaba ver los partidos, si no jugar, pero a veces me sentaba frente a la tele para ver algún partido y demostrarle a mi madre que, en efecto, el fútbol me gustaba mucho.
Fui un dedicado tonto. Entré a un equipo de tercera división profesional a los 14 años, carecía de vida social, no tomé, fumé ni salí hasta los 18. Dejé todo por el fútbol; novias, amigos, familia, tiempo. Entrenaba 4 o 5 horas diarias, después del entrenamiento me quedaba yo sólo en la cancha a afinar alguna cosa que me hubiera fallado en el partido o práctica. Seguía al pie de la letra las palabras del entrenador, del nutriólogo. Si el entrenamiento se suspendía yo me iba a correr a la playa, siempre trataba de estar en forma para el fútbol. Grave error. Grave.
Mientras más me iba acercando a la edad productiva dentro del fútbol profesional, más me daba cuenta de la mafia en la que estaba. Que si no conocías a alguien dentro de la federación, no podías llegar muy lejos.
No aprendí la existencia de la corrupción hasta en la venta de hielitos en el estadio donde jugábamos. Aprendí que cuando la gente te dice “échale ganas”, es sólo un decir. Tenemos que ser muy cuidadosos y sobre todo inteligentes en la toma de decisiones, porque “echándole ganas” no vamos a lograr nada, si no lo hacemos con un orden y un plan.
Por favor, échenle ganas, pero no a lo pendejo, como yo. ¿no?.
Al terminar mi etapa “futbolera”, hubo cambios en mi vida, feos, bonitos y feos. Pareciera que todo
lo difícil de mi vida pasó entre los 14 y 18 años.
Moraleja: Aténganse a las consecuencias de un acto pasional.
lunes, 7 de febrero de 2011
Las batallas en el desierto
miércoles, 2 de febrero de 2011
'39
viernes, 28 de enero de 2011
jueves, 20 de enero de 2011
Mr. Tambourine Man
miércoles, 19 de enero de 2011
Carta a Francia
jueves, 13 de enero de 2011
lunes, 10 de enero de 2011
¿Que vas a hacer en tu "cumple"?
viernes, 7 de enero de 2011
post-it
jueves, 6 de enero de 2011
2010
so... 7 días tarde, pero aquí está mi resumen de mi año 2010:
Fue un año de drásticos cambios, sentimentales, académicos, laborales, intelectuales. Tomé muchas decisiones importantes para mí. Nadie lo notó, sólo yo. Me enamoré, me des-enamoré, enamoré, des-enamoré. Hubo retro-alimentación, conocí mucho arte, en general, música, pintura, cine, literatura.
De ese arte que me ha hecho preguntarme "¿Qué mas quiero en la vida?", y que mis co-relacionados califican de "exagerado" (y que claro, a mi me vale madre). En verdad que nada me hace falta cuando tengo una guitarra en mis manos, cuando escucho jazz, cuando analizo una pintura de Mondrian, tan simple y tan expresiva, cuando leo a Sabines, cuando sin planearlo salgo de mi casa con mi cámara a dar un "paseo fotográfico" y resultan las mejores tomas, cuando mi sobrino sonríe, cuando diseño un espacio, cuando canto a todo pulmón “golden slumbers” mientras viajo en mi carro, nada me hace falta cuando paso la tarde platicando con mi madre, me siento suspendido en el aire cuando pasa todo esto, y cuando pasa todo lo que tengo en mi lista que nunca publicaré.
Fui muy feliz en 2010, siento una transición muy importante.
martes, 4 de enero de 2011
Cómo envidiar a Leo parte II
Lo que hizo bueno el concierto versión yo, fue también todo lo que estuvo a su alrededor. Como alma en pena llegué al punto de reunión, con la incertidumbre de la correcta función de mis tareas para llegar al concierto. Apenas divisé a otro individuo de características similares a las mías y me dirigí a él con una pregunta a larga distancia -¿este es el autobús para el concierto de Roger Waters?. Lo que desencadenó 36 horas de superficial amistad (superficial, pero muy interesante). Él era, ni más ni menos que el dueño de estudios ámbar, de Guadalajara (para los que no saben de que hablo, este estudio hospedó en algunas de sus grabaciones a la celestina, a rostros ocultos, plastiko, los auténticos decadentes, la cuca, José fors, entre otros.
Yo estaba muy emocionado y el wey parecía un poco aturdido por tantas preguntas y platicas de su compañero de viaje. Pero podíamos platicar de los inicios de Pink Floyd, de Roger Waters, de Bob Dylan y sus viajes por el sur de Estados Unidos, de David Bowie, de Brian Eno, Genesis, Beatles, Roxy Music, Stevie Ray, de guitarras Fender, de Gibson, conciertos que cambiaron nuestras vidas, de su gira con Café Tacvba por toda Asia y de cómo esta mexicana banda ha llegado a niveles impresionantemente cercanos de los mejores músicos mundiales.
Llegamos al depósito de feos a eso de las 10 am, gracias al “coachalote” chofer del autobús (4 paradas de 40 min). Una sonrisa se apoderó de mi cara cuando vi al monumental palacio de los deportes (pero algo decepcionado por los rumores de su malísima acústica). El amigable nuevo compañero me invitó a pasar el día con su amiga.
“Su amiga”, es la baterista de su banda, una persona de 1.55, tatuajes visibles en antebrazo derecho y espalda, apellidos europeos, decana de fermatta (una de las mejores escuelas de música de México), bastante agradable, preferencia sexual distinta a la mía, acompañada de su novia. Su novia, era una rubia de baja estatura muy guapa, de esas personas que más allá de sus rasgos físicos, su personalidad exhalaba comodidad y seguridad, ella es cantante y actriz en algunas de las obras de teatro más importantes del D.F.
Y así continuó mi tour, rodeado de personas dedicadas a algún arte.
Arribamos al concierto. Una guapa edecán, al enseñarle mi boleto con el texto “asiento A-27”, me dijo con una sexy voz y –según yo- cierto tono insinuante: “sígueme guapo”. Me llevó a la última fila, la primera del escenario hacia atrás.
El concierto fue alucinante, tantos años de escuchar un disco al derecho y al revés, no pueden ser mejor recompensados que escuchándolo en vivo, el arte visual fue extraordinario y placentero, sonreí y canté de principio a fin. Descubrí que me sé todo el disco, je.
Y ya siendo objetivo, el sonido del “palacio de los rebotes” dejó mucho que desear, el ingeniero de sonido fue muy tímido en la ecualización dejando algunas frecuencias muy por debajo de su nivel óptimo. La banda tuvo errores de amateurs; el guitarrista empezó a tocar “run like hell” en un espantoso acorde fuera de lugar, provocado por la errónea afinación de su guitarra, pasando el 75% de la canción intentando cambiar de tono sus cuerdas.
Comparando “The Wall” con “Dark side of the Moon”. Debo admitir, que, aunque tenía una gran expectativa de que “The Wall” fuera mejor que “Dark side of the Moon”, no fue así. El lado oscuro de la luna, sigue siendo el mejor concierto en el que he estado en toda mi vida.
De nada. =)